Amar y sentirse querido
14/07/2022
Joan Carles Sasplugas
Te quiero por amarte y no por ser querido
Nada te hará más feliz que amar y sentirte querido. El hombre es un ser que necesita amar y sentirse querido, y cuando no es así, siente que algo no está en orden o está fallando. Si no se puede satisfacer la necesidad de amar y sentirse querido, la vida se vuelve insípida, vacía e incluso difícil de soportar.
La necesidad de sentirse amado se manifiesta en infinidad de dimensiones: divina, espiritual, física, biológica, psicológica... Y es necesario llenarlas todas, de lo contrario, llega el desequilibrio e incluso la enfermedad psíquica. Nada abre tanto el corazón y genera tantas buenas vibraciones como amar y sentirse querido. Sin amor nada tiene sentido, sin amor estamos perdidos, sin amor corremos el riesgo de entrar de lleno en la zona oscura de la vida. Indiscutiblemente, existen varias formas de tocar el alma, pero el amor es la más sublime.
El hombre no puede vivir sin amar y sin sentirse querido. El amor es lo que da sentido a nuestra vida, es el camino perfecto hacia la felicidad. Es el paraguas bajo el que circulan todas nuestras mejores prácticas en la vida. Todo lo que generamos de auténtico valor, todo lo que aportamos de positivo a la vida tiene una gran carga de amor. Las personas que siempre tienen este paraguas desplegado, son las que yo llamo generadoras de valor y vida, son las que aportan permanentemente su granito de arena para hacer que este mundo sea cada día algo mejor.
A menudo no somos conscientes del valor que tenemos depositado en nuestro corazón hasta que algún día perdemos el amor. Otras veces no sabemos lo que hemos estado perdiendo hasta que un día, casi siempre sin buscarlo, inesperadamente lo encontramos. Y una vez se ha generado en una dirección, cualquiera que sea su dimensión, para asegurar su continuidad, es necesario el alimento que le hace sobrevivir y lo hace crecer: la reciprocidad. Y generalmente esa reciprocidad llega después de que tú hayas dado tu amor. Pero primero mujer, y espera.
Me encanta la frase de la magnífica escritora francesa George Sand: “Te quiero por amarte y no por ser amado, porque nada me complace tanto como verte a ti feliz”.
Juan Carlos Sasplugas i Vilagut, nació en Barcelona el 27 de agosto de 1958. Se define como un espectador de la vida, que ha disfrutado literalmente de su trabajo desde el primer día que empezó a trabajar. Alguien lo presentó como un coleccionista de aforismos, que desnuda su alma tomando como punto de partida el conjunto de creencias que defiende. Y seguramente es así. Es el autor de La reflexión del día y Proyecto Felicidad, ambos publicados en Tarannà Edicions.